La casa busca las relaciones deseadas con el contexto. El interior se ahueca en busca de relaciones diagonales, se llena de luz natural. Al exterior la casa se muestra compacta, más hermética. El volumen emergente se quiebra para albergar estancias exteriores en privacidad. Los espacios interiores, o se prolongan hacía el jardín envolvente, o capturan las visiones del entorno elegidas. El dormitorio mira a la cumbre, el despacho al mar, el salón a la ladera no construida y otras estancias enmarcan fragmentos del cerramiento. La casa así concebida emerge desde dentro, evadiendo condicionantes geométricos impuestos. El zócalo masivo, que contiene la parcela, se perfora sólo para permitir el acceso; sobre éste, el cerramiento se desmaterializa. Una escultura multifunción que genera escenas de gran plasticidad, soporta el alumbrado exterior, contiene hilo musical, una ducha, a la vez que protege; un elemento dinámico y cambiante que aporta valor añadido.
DATOS TÉCNICOS
ARQUITECTOS: Pedro Romera García, Ángela Ruiz Martínez |Romera y Ruiz Arquitectos S.L.P.|
CLIENTE: Privado
COLABORADORES: Dasio Rasco Cobas |ARQUITECTOS|
ARQUITECTO TÉCNICO: D. Manuel Hernández Vera
FOTOGRAFÍA: Juan Correa
SITUACIÓN: Urbanización Santa Margarita, Las Palmas de Gran Canaria, Gran Canaria, España